Una mañana de mayo con un cielo gris
propio de ese mes, yo me encontraba atareado con algunas cosas de trabajo, mi
esposa, partiendo a laborar es una época dura, hace algunos años atrás era todo
más fácil con hijos pequeños,sin entender las dificultades que habían en casa
conviviendo con nuestras alegría, y siempre
lejanos a todo lo demás, pensaba como sería el final de una relación donde la armonía
está relacionada a proyectos familiares que marcan nuestros día, muy atrás ha quedado los besos, la pasión y
esa conexión de dos personas que se aman, sin embargo seguíamos adelante no sé si por terquedad
o amor el resultado es el mismo. Algunas veces las personas suponen que el
creer en Dios es motivo suficiente para tener la salvación pero es todo lo
contrario porque en la vida misma tenemos que demostrar cuán grande y fuerte
puede ser nuestra fe. Siempre he creído que las señales en la vida vienen de lo
divino y le llamamos coincidencia por eso muchas veces no parecemos darnos cuenta lo que sucede a nuestro alrededor. Esta historia es
como de muchos de nosotros con escenarios mezclados entre la tragedia y la
comedia, cargado de situaciones llenas de sorpresas que marcan el camino
diariamente es una ecuación de sueños de un amor lejano que duele aun por la
frustración de no lograrlo. Es un amor imposible como el poeta soñó, es un amor que duele y se consuela con una
palabra o una sonrisa es limpio y mágico a la vez pero lleno de tristeza.
J.V.J