Mujeres de la noche

Hoy es un día muy especial estoy empezando  de nuevo a escribir notas propias,estuve un poco bloqueado al no tener el tiempo necesario para hacerlo, pero buscaba siempre poner artículos que puedan servirles para nutrirse de una buena lectura  y que mejor manera para regresar el dedicar estas lineas y brindar un pequeño homenaje a todas las mujeres que trabajan honestamente en horarios nocturnos a las cuales veo esmerarse para salir adelante. Quizás el titulo suene subjetivo pero no lo es, son mujeres muy valiosas que la oscuridad de la noche oculta su esfuerzo, la lluvia del invierno lava el sudor de sus rostros lleno de sueños, son esposas, madres y estudiantes es decir personas que encuentran en este horario la posibilidad de crecer y ayudar sostener a su familia, podría ser no entendido si lo vemos con indiferencia,  pero existe un doble esfuerzo y una lucha que de ya es gratificante. Hay historias fascinantes como la señora María, una mujer menuda que vende cigarrillos y golosinas mas de veinte años en esta zona cercana a mi trabajo aquel hijo al cual vi crecer acompañándola para hacer menos duras las noches ya es un joven talentoso con las manos,hoy es un especialista en alta repostería . Ella me contaba que tenia que atender por las mañanas a su hija, una ñina postrada muchos años por una enfermedad degenerativa sin embargo la señora María siempre trabajaba ya no con la frecuencia de antes, solo los fines de semana pero igual cada día los llenaba de esfuerzo para salir a ganar. Hay muchos casos como una jovencita que empieza su caminar a las 22:00 hrs. ofrece café. chocolate caliente y diversos sanguches, es estudiante que encuentra en este trabajo nocturno la forma de sostenerse y pagar sus estudios es una chica de provincia que la gran ciudad no le genera miedo y no la va vencer.  La limpieza publica que se realiza en las noches en casi toda la ciudad lo efectúan  mujeres de todas las edades en condiciones de laboral, siempre cubiertas de pies a cabeza no para evitar ser vistas, sino para protegerse del frió de la noche, siempre rápidas sin decaerse  barriendo las calles mientras el resto duerme. La ciudad despierta limpia y muchos de nosotros no sabemos que se lo debemos a grupo de mujeres que existen y merecen todo nuestro respeto, es necesario escribir sobre ellas porque muchas de las personas tenemos miedo enfrentar la vida porque estamos llenos de prejuicios que limitan nuestro accionar, especial los jóvenes que tienen sueños pero están envueltos de temores  reduciendo sus posibilidades y no saben como empezar. Hay un agotamiento que casi nadie percibe pero esta allí en cada parte de la ciudad, esfuerzo, frió y hambre  que la noche se encarga de ocultarlo .

J.V.J