Avanzando

hoy es un día como tantos llenos de energía, cargando siempre nuestras frustraciones como un equipaje muy pesado, pero encontramos la forma de hallar alguna idea nueva e intentar sacar a delante nuestros retos diarios con esa voluntad intoxicada de injusticia sin caer en lamentaciones, al contrario vivimos cada día como si fuera el ultimo. Los programas de televisión muestran una sociedad deteriorada que me hace pensar y me pregunto cuanto hemos avanzado, los resultados nos entregan una lamentable verdad, nada.  Es como si nos vistiéramos con una ropa muy costosa y con zapatos importados, mejoramos nuestra apariencia para mostrar a los demás que económicamente nos va mejor, pero por dentro tenemos que preguntarnos si como persona nuestro crecimiento es paralelo a esa mejora económica que aparentamos.  Muchas veces las experiencias sirven para reflexionar y sacar conclusiones si lo vivido hasta hoy viene siendo lo adecuado, es imposible creer que nuestra vida sea totalmente perfecta, es adecuarse necesariamente a esa inestabilidad propia de nuestro destino y saber afrontar cada reto con la calma que ello requiere.
La apariencia solo es un disfras necesario, el maquillaje que inspira confianza pero igual no debe ser determinante.

J.V.J